
Esta red social puede ser explotada independientemente para un personaje público, una empresa o simplemente por un individuo que quiere ser leído, visto o escuchado, personalizando (en la medida que sea posible, dentro de los parámetros que Facebook establece) la exposición y recepción de información.
Este medio de comunicación, a diferencia de los convencionales, tiene la ventaja del ‘feedback’ con su público, pues pasa de ser unidireccional a bidireccional (incluso, multidireccional, ya que forma parte de una red de redes). De modo que el usuario puede tener una relación más estrecha con sus diferentes públicos de interés.
Asimismo, es más específico en cuanto a lo que ofrece en sus contenidos para sus demandantes, ya que los seguidores o visitantes pueden escoger o inclusive manipular qué y cuánta información desean recibir. De este modo, no se sienten abrumados de oferta masiva; la conexión entre ofertante y los demandantes se vuelve más directa o íntima.

Y para concluir, no debemos dejar de tomar en cuenta el ‘Facebook insights’. Esta es una aplicación que nos ayuda a tener un monitoreo sobre nuestro público y analizar específicamente qué tanta llegada estamos teniendo con él, conocer sus intereses según categoría y características puntuales.
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